Unidades de policías de tres ciudades de
Bolivia se amotinaron este viernes contra el presidente
Evo Morales, quien descartó someterlos con una acción militar, mientras la oposición exige en las calles su renuncia tras su cuestionada reelección.
La primera en rebelarse fue la Unidad Táctica de Operaciones Policiales (UTOP) de la ciudad central de
Cochabamba y poco después se amotinaron los comandos de la policía de Sucre (sur, la capital de
Bolivia) y de Santa Cruz, rica región del oriente del país y bastión opositor.
“Estamos amotinados”, dijo escuetamente a una televisora local -y con el rostro cubierto- un policía de la UTOP de Cochabamba, unidad encargada de
reprimir manifestaciones.
“La policía de Chuquisaca (Sucre) se está uniendo en apoyo a los camaradas que se han amotinando en Cochabamba”, declaró a su vez otro agente de la
capital boliviana que también tenía el rostro cubierto.
El gobierno de Morales descartó
ordenar una operación militar para someter a los policías rebeldes, anunció el ministro de Defensa, Javier Zavaleta.